+ Con todos los que sufren +

Publicado por Javier de Montse CCaná El 31 diciembre 2008 0 comentarios

La Iglesia «no puede estar ajena a los sufrimientos de los más débiles espiritual y materialmente, aunque se vea expuesta a la incomprensión»
(Arzobispo Julián Barrio, 30-12-08)

Acoger la gracia de Dios y vivir una vida al servicio de los demás son los apoyos del peregrino hacia la ciudadanía de los santos en la sencillez de la vida cotidiana, superando la negligencia, la superficialidad y el conformismo y asumiendo la paradoja de que quien quiera ser el primero deberá hacerse servidor de todos porque el Hijo del Hombre ha venido a servir y no a ser servido, sin acomodar el Evangelio a nuestros criterios porque es verdad que los cristianismos fáciles han sido siempre los más opuestos al Evangelio y los apostolados cómodos también son los más inoperantes para la salvación real de los hombres. Cristo ha de ser la fuerza determinante de nuestra vida y de nuestras acciones, porque en Él encontramos la verdad de Dios y del hombre que nos hace libres.
Dende esta perspectiva, a Igrexa no pode estar allea aos sufrimentos dos máis débiles espiritual e materialmente aínda que se vexa exposta á incomprensión. Ante isto, o camiño que o cristián debe andar non é o do privilexio senón o de beber o cáliz do Señor, dando testemuño valente e decidido da nosa vocación cristiá e anunciando a Cristo sen impoñer nada a ninguén; non porque nos consideremos mellores que os demais senón porque habemos de deixar que a forza de Deus actúe na nosa vida.

Compartir a sorte de Cristo é servir a fondo perdido e servir así é empezar a vivir e facer que os demais teñan as condicións necesarias para que non se vexa ferida a súa dignidade de persoas. “Quen garde a súa vida, pérdea, e o que entrega a súa vida a gana”.

0 comentarios por + Con todos los que sufren +